Chaqueta de interno

La chaqueta de recluso era utilizada entre 1948-1958. Luego de la eliminación del uniforme a rayas en 1947, los trajes para los presos fueron unificándose en un modelo más sencillo, de fácil confección, y se realizaban en las sastrerías de los establecimientos penitenciarios. El color predominante fue el marrón; en sus inicios las chaquetas llevaron un brazalete azul en el tercio superior del brazo izquierdo y una franja de la misma tela en la parte superior de los bolsillos. Se confeccionaban en tela de brin para el verano y en paño para invierno. Esta chaqueta se acompañaba con pantalón y sombrero tipo birrete. Con el tiempo se eliminaron los brazaletes y los uniformes fueron utilizados, prioritariamente, para las actividades laborales, es decir se paso del concepto de identificación de seguridad a prendas de trabajo. El uniforme se completaba con zapatos o alpargatas, para las colonias penales agrícolas.